La ministra de Transporte, María Fernanda Rojas, reconoció durante su visita al kilómetro 18 de la vía Bogotá–Villavicencio que el Gobierno no cuenta con recursos disponibles para atender la emergencia que mantiene en riesgo la movilidad entre la capital del país y los Llanos Orientales.
“Se removieron cerca de 10.000 metros cúbicos de tierra, pero el material volvió a deslizarse. La montaña está en un proceso de remoción y no podemos comprometer fechas sin tener claridad técnica ni presupuestal”, afirmó la funcionaria.
Ante la imposibilidad de garantizar una solución inmediata, las autoridades mantienen la operación bajo el esquema 4×2, es decir, cuatro horas de tránsito de Villavicencio a Bogotá y dos horas en sentido contrario.
El vicepresidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) advirtió que sería irresponsable fijar un plazo para superar la emergencia, dado que las condiciones geológicas siguen siendo inestables.
Mientras tanto, transportadores, comerciantes y viajeros denuncian millonarias pérdidas por las restricciones, lo que incrementa la presión sobre el Gobierno para encontrar una salida definitiva a la crisis de esta carretera vital para la economía nacional.
Discussion about this post